Un encuentro con el bailaor Gabriel Matias
Este joven flamenco nació en una ciudad con esencia histórica y cultural, Porto Alegre Brasil. Solo tenia once años cuando comenzó a taconear con grandes maestros a donde llego de la mano de su madre. Hoy se encuentra en la capital de España, Madrid donde ha desarrollado la carrera recibiendo importantes premios. Mientras evolucionaba la pasión por el arte, se graduó con el título de Danza en la especialidad de Pedagogía del Baile Flamenco. Compartió escenarios trabajando con prestigiosos bailores y bailaoras. En 2020, presentó Ellos, el primer espectáculo de su autoría en el XXIV Festival de Jerez.
Nació en Brasil, nos interesa saber como se encuentra con el flamenco?
He empezado a bailar por casualidad, al final, el flamenco no forma parte de la cultura brasileña aunque se esté desarrollando por todo el mundo cada día más. La actividad física y el deporte siempre estuvieron presentes en mi casa. Mi padre fue jugador profesional de fútbol y mi madre practicaba de joven gimnasia artística y, aunque, más tarde, mis padres hayan dedicado su vida a otras profesiones, el incentivo a la actividad física siempre estuvo presente en casa. Mi madre empezó a bailar por indicación de una amiga suya que conocía a una academia de flamenco. Se apuntó y al momento se enamoró. Fue en el año 2005 y yo tenía 10 años entonces. Ella me recogía del colegio y le acompañaba a la academia dónde tomaba las clases de baile. Al principio el flamenco no me llamaba la atención, tenía una profunda timidez. Al año siguiente, el ritmo, la música y la posibilidad de subirse en un escenario me despertaron la atención por el flamenco. Hasta el día en que su maestro, Robinson Gambarra, me invitó a tomar una clase de baile. Me enamoré rotundamente y desde 2006 he dedicado mi vida al flamenco. Aunque nunca se haya dedicado profesionalmente al flamenco, mi madre fue la persona que más apoyo me ha dado para que siguiera esta profesión.
En Madrid donde reside colabora con compañías importantes del flamenco, que detalles nos puede brindar acerca de este tema?
Tuve la oportunidad de trabajar en tres compañías diferentes: Antonio Canales, Javier Latorre y Rafaela Carrasco. Lo enriquecedor de todo esto son las sabidurías que aportan cada maestro. Son diferentes maneras de ver el arte y cada uno ha aportado su visión para que yo pueda encontrar la mía. Es muy enriquecedor, y tuve/tengo mucha suerte de vivir estas experiencias. Lo triste de los procesos creativos es que se suman muchos esfuerzos (meses de ensayo, creación de nuevas coreografías, etc.) para que luego la recompensa sea insatisfactoria. Los espectáculos, de manera general, se representan muy pocas veces. Los festivales exigen cada vez más estrenos. Es muy complicado.
Ha sido reconocido con grandes galardones dentro de este arte, como recibe esos reconocimientos y como los administra como artista y persona?
Los reconocimientos que tengo, por más pequeños que sean, se hacen grandes en mi corazón. Soy grato a cada uno de ellos. Los premios son los que te empujan a seguir adelante en un momento de dificultad o duda. Son señales de que alguien está pendiente de ti. Pero hay que tener la cabeza muy fría y los pies bien anclados en el suelo. Nada sustituye el trabajo diario y el ser un buen compañero de trabajo, manteniendo la ética y controlando el ego.
Nos puede relatar de que se trata su espectáculo ELLOS?
Este espectáculo se hizo gracias al Premio Extraordinario del Festival de Jerez dónde me reconocieron como Mejor solista profesional figura masculino en el marco del Concurso Internacional Flamenco Puro 2019. El premio en sí consistía en una noche en el siguiente Festival de Jerez. Así fue como he llegado a presentar mi primer espectáculo en uno de los más importantes festivales de flamenco del mundo. Todo un sueño, y una responsabilidad también. Ser joven y extranjero de alguna forma ha sumado peso a esta responsabilidad. En mi primer espectáculo he tratado sobre el factor que más ha incidido en mi baile en los últimos años: el estudio de los maestros. He coreografiado un recital de baile, con una atmósfera argumental que trata sobre el baile clásico. Güito, Mario, Tomás de Madrid…he dedicado a cada uno de ellos una coreografía (soleá, garrotín, alegrías). La idea del espectáculo no era la de hacer una reconstrucción coreográfica, sino un homenaje. Tuve la suerte de contar con Mercedes Cortés al cante, Alejandro Moreno a la guitarra y Lisi Sfair en las palmas.
Donde y como conoció el duende?
El duende lo conocí en 2010 cuando vi por primera vez a Eva Yerbabuena bailar por soleá. Es imposible describir la sensación. Magia quizás lo defina. Lo que sé es que el duende no avisa cuando va aparecer. No hay hora ni lugar. Creo que estuvo presente en uno de mis mejores momentos sobre el escenario. En la final del Concurso de Jerez en 2019, bailé por tarantos. Viví un momento sin par. Había una directa comunicación entre los músicos, el público y yo. La energía fluía… Quizás esto sea a lo que llamen duende.
Con que sueña un artista como usted?
Sueño con el día en el que, nosotros artistas, tengamos estabilidad económica. Con el día en que se dé el debido valor al arte. Que no dependamos de los turistas para llenar los tablaos, que sean los propios ciudadanos de un país los que se interesen por el flamenco y por el arte en general. Sueño con que se paguen debidamente los ensayos a todos los bailarines; que todos los artistas estén dados de alta; que hayan leyes laborales acordes con las actividades.
Nos parece un sueño noble para muchos tener la posibilidad de vivir del arte y también vivir para el arte. Por lo general se asociaba al artista con el estereotipo de un ser bohemio con una vida bastante modesta. ¿Pero por qué? Bueno, si revisamos un poco en el pasado, encontramos personajes que no eran ricos o de plano vivían en la miseria, como Van Gogh, Allan Poe, Kafka, Wilde, entre otros. Para cualquier despistado, con eso basta para asumir el hecho de que ser artista no es rentable, por lo tanto se minimizar la parte económica del arte y del artista en general. Lo curioso es que —en su mayoría— se trata de personajes que vivieron hace muchísimos años, y hoy en día la realidad es otra realidad. Siglos y siglos de historia demuestran que el arte es parte de la crónica de la evolución de la humanidad. Que no falte en pocas palabras poner en valor el arte.!!!!!. Que las políticas culturales estén a favor del artista y de la importancia que tiene un gestor cultural, como por ejemplo un bailor, un músico o un cantaor/cantaora, y su rol como agente del cambio de la sociedad. EL FARO desea que se vengan tiempos mejores para todos y todas!!!!. Que el arte fluya. Ole por este bailaor
Las fotos que acompañan la entrevista son de Lucrecia Diaz.
Instagram @gabrielmatiasflamenco , youtube https://www.youtube.com/user/gabmatias1, facebook https://www.facebook.com/gabrielmatiasbailaor/. web
www.gabrielmatias.es
Comments