El Faro emite luz con el coreógrafo y bailaor Antonio Montoya
Él llegó a este mundo en una ciudad que es considerada (entre otras) cuna histórica del flamenco. Utrera se sitúa en la provincia de Sevilla, es ahí donde el bailaor despunta el arte con la fuerza de sus antepasados, raíces embellecidas que hacen imposible no relacionarlo con la filosofía del flamenco, así encontró un camino y con esa premisa lo recorre en defensa de todas las expresiones del arte jondo, con la acepción más pura.
Y, si!!! Antonio ¡!está hasta la peineta¡! es por eso que se reinventó, con lucidez y originalidad, en este contexto estimula el próximo proyecto que entre otras cosas tiene como protagonista la fotografía, impulsada con estética y concepto por compañeros y compañeras que aman este arte.
El artista utrerano, así lo llaman, bienvenido a este lado del océano, ¿puede hablarnos respecto a sus orígenes?
Soy nacido y criado en Utrera, en el seno de una familia aficionada y dedicada al arte flamenco, mi bisabuelo El Morsillato, ya se ganaba la vida cantando y bailando, su hijo (mi abuelo) era conocido como El Talega y cantaba y bailaba …y mi madre La Talega también aficionada. Por parte de mi padre, mi abuelo Salvador Montoya también se ganaba la vida cantando y bailando, con la peculiaridad de que bailaba con una botella de vino en la cabeza ¡!.
Yo me he criado en toda esta tradición, es lo que he mamado, el flamenco. Así que con cinco años comencé a estudiar porque ya sabía lo que quería hacer.
¿Que significa para usted amar el arte jondo?
Para mí amar el arte jondo es una forma de vida, algo fundamental, como respirar.
¡Vivir la experiencia del aprendizaje artístico!! es a nuestro entender única. Usted educa, enseña y entrega todo un tesoro, ¡¡¡una joya cultural!!! “el flamenco”. La enseñanza a través de su escuela ¿que tiene de particular?
Yo me centro mucho en la escuela sevillana, busco lo tradicional, su línea depurada, el baile de mujer sinuoso, haciendo hincapié en la posición, en los brazos, la elegancia las manos. En el hombre me centro en las líneas sobrias, varoniles, todo lo que engloba la escuela sevillana, que es lo que yo aprendí de mis maestros.
Es encantadora la originalidad y la calidad artística de las imágenes que usted ha estado atrapando para el contenido del proyecto HASTA LA PEINETA, ¿puede relatarnos cómo nace y a donde va esta puesta en escena?
Durante el confinamiento yo estaba pensando en lo que sería mi próximo espectáculo, entre otras muchas cosas tenía que pensar un nombre , y allí me veía con la que estaba cayendo, sin poder salir de casa , y, vi una peineta…y la cogí….y dije “Estoy hasta la peineta” y allí surgió sin más….la primera idea fue hacer un mural de amigos y compañeros posando con una peineta para mi espectáculo, pero se fue de las manos y cuento con más de 2000 imágenes, cada cual mejor y cada cual con una historia afín a la mía…
¡¡¡La peineta es un ornamento femenino bello para el cabello que consta de un cuerpo convexo, pero también puede parafrasear con un gesto de ya no más!!! Intuimos que usted muy inteligentemente argumento a la peineta. ¿Qué nos puede decir de ello?
La peineta ha ido viajando a través del tiempo, llegando a ser un complemento magnífico y en ese viaje en un país como es España, lleno de chascarrillos y/o dichos “estoy hasta la peineta” es una manera muy fina e irónica sin decir ninguna palabra malsonante, y, que por supuesto aquí todo el mundo entiende (risas)
Lo importante de todo esto es que me sentía harto, ha tenido que suceder una gran desgracia para darnos cuenta que de los artistas estamos en un eslabón infrahumano del que es muy difícil salir con un ápice de dignidad.
Lejos de ser una mera manifestación artística y folklórica, la carga simbólica del género flamenco en el marco de la cultura es innegable. ¿Qué sucede en estos tiempos con este arte a nivel políticas culturales en España?
En la actualidad para la política no sólo de nuestro país sino a nivel global , la cultura se resume en un montón de familias que están en una situación muy dura,con una mano delante y otra detrás ( aquí otro dicho ), en exclusión social, pasando hambre, sin poder hacer frente a la hipoteca, alquileres, etc; todo esto a causa de la pandemia si!!!. Sin embargo también a causa de no haber cuidado antes de los artistas, en cuanto a convenios, contratos ,cotizaciones, entre otras políticas públicas. Los artistas no vivimos del aire y pareciera que nuestro trabajo es humo.
Para volver al romanticismo del arte. ¿Quién o qué es el duende?
¡¡¡¡El duende!!!! el duende es una forma de hablar, algo místico, mágico, a veces sucede y a veces no, todo depende de la circunstancia, de la situación, de tu propia impresión. Es como el enamoramiento a veces lo hay y a veces no, todos lo perseguimos porque cuando se da es eso: ¡¡¡MAGIA!!!
¿Con qué sueña Antonio Montoya?
Con poder llevar mi espectáculo a muchos sitios y llegar a mucha gente…
¿Quiere agregar algo más a este encuentro?
Quiero agradeceros esta entrevista, siempre es un placer sentirse reconocido en tu trabajo y el poder llegar a personas que aún estando lejos comparten afición por un arte tan grandioso como es el flamenco. Gracias de corazón.
Un placer cerrar el año de la revista web EL FARO con tanta creatividad. Quedamos tamborileando los dedos y esperamos verlo en Argentina pronto.!!!! ole !!!!.
Las fotografías son gentileza de la producción a cargo del proyecto HASTA LA PEINETA.
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